KURDISTÁN IRAQUÍ “NUEVA VOZ”
La cotidiana violencia en Irak y el difícil proceso de formación de un gobierno plural –que finalmente acaba de conseguirse- han monopolizado la atención pública internacional para la cual son desconocidos algunos desarrollos menos espectaculares, pero importantes sin duda en la construcción de una sociedad más abierta y participativa. Por ejemplo, la periodista austriaca, Mary Kreutzer, ha realizado un interesante reportaje sobre un proyecto radiofónico lanzado en la zona kurda del norte iraquí, cuyo propósito fundamental es servir de fuente noticiosa y de información independiente, sin nexo con ningún partido político. Se trata de “Nueva Voz” (Dengue Nué en kurdo), una estación de radio que pronto transmitirá una programación constituida sobre todo, por temas relacionados con los problemas de los jóvenes y las mujeres en esa conservadora sociedad. El equipo realizador de este esfuerzo está integrado por catorce mujeres y hombres jóvenes, sobrevivientes todos del ataque con armas químicas realizado por Saddam sobre la zona de Halabja en 1988. Las biografías de estas personas están así marcadas por un pasado traumático de muerte, escapes, exilio y confinamiento en los llamados Pueblos Colectivos, controlados por las fuerzas baathistas del dictador. Su yugo se prolongó después de 1991 con la instalación en la zona de grupos islamistas cuya política de control mediante el terror y de sometimiento de la población femenina, acabó con las aspiraciones de libertad general. No sería sino hasta 2003 que los islamistas serían echados de la región mediante el esfuerzo conjunto de los “peshmergas” kurdos y las fuerzas de la coalición encabezada por Estados Unidos. La estación “Nueva Voz” es así uno de los primeros frutos de los nuevos vientos que soplan, y sus propósitos son contribuir a la creación de una sociedad civil con capacidad de expresión libre, crítica abierta y salvaguarda de los derechos humanos.
La población kurda en Irak está compuesta en un 60% por jóvenes y es a este sector a quien “Nueva Voz” intenta especialmente dirigirse con objeto de crear un amplio diálogo que incluya a público de regiones remotas. Se ha planeado por tanto, centrarse en tópicos que representan genuinas inquietudes, tales como la lucha contra la violencia hacia las mujeres y su deliberado mantenimiento en el analfabetismo, temas de salud pública, sexualidad y contracepción, status legal de las mujeres, lucha contra los prejuicios extendidos durante el dominio islamista y análisis serio y comprensible de la situación geopolítica en el Oriente Medio, en especial lo que se refiere a Irak y al Kurdistán. El aprendizaje y desarrollo de prácticas democráticas y la creación de instituciones que puedan asegurar un futuro pacífico son algunas de las prioridades adicionales del equipo de Dengue Nué. La organización austriaca, Wadi, junto con la ACDI-Voca estadounidense y la estación española de radio Gladys Palmera, se han comprometido con toda seriedad al apoyo de este proyecto mediante recursos económicos, asesoría y creación de talleres de preparación de quienes trabajarán en la estación de radio. Por lo pronto, las intensas discusiones que se llevan a cabo entre los catorce miembros del equipo y sus asesores son expresivas de las aspiraciones y temores que de manera constante se entrecruzan al tomar las decisiones de cómo y qué transmitir. Hay cautela e inseguridad por las experiencias que ahí se han vivido al contacto con las fuerzas ultra conservadoras y represivas que por tanto tiempo fueron dominantes, pero al mismo tiempo, es notable el arrojo de muchos de ellos, determinados como están a luchar por medio de las ondas de la radio para hacer crecer las nuevas semillas de libertad e igualdad con las que ahora cuentan.